Tonometría

Consiste en la determinación de la presión interior del ojo y es fundamental en la detección precoz del glaucoma. El glaucoma es una enfermedad ocular que provoca un daño progresivo del nervio óptico, la parte del ojo que transmite las imágenes en el cerebro.

La mitad de los pacientes con glaucoma no sabe que los tiene porque generalmente no produce síntomas evidentes, como dolor o pérdida brusca de visión, y en la mayoría de los casos, el afectado no es consciente de que sufre glaucoma hasta que ha perdido gran parte del campo visual. La enfermedad multiplica por cuatro el riesgo de caídas y supone un grave peligro para su conducción.

La tonometría nos permite detectar la sospecha, pero por sí sola no es suficiente para determinar que un paciente tiene glaucoma. Debe complementarse con un estudio del fondo de ojo (retinografía) y un campo visual (campimetría).

Los factores de riesgo son:

  • Edad (mayores de 60 años).
  • Antecedentes familiares de glaucoma.
  • Hipertensión ocular.
  • Miopía o hipermetropía alta.
  • Traumatismos oculares.
  • Raza negra o asiática.

Nuestro protocolo de visita incluye siempre la tonometría con el fin de detectar la sospecha de glaucoma y poder derivarte a tu oftalmólogo para que haga el diagnóstico adecuado.